La historia que a continuación les voy a contar sucedió hace seis años. Éramos un selecto grupo de Scouts, mejor conocido como La Corte de Honor, que son los Guías y Subguías de Patrulla. El pintoresco grupo estaba conformado por kikewaa , su hermano Andrés, Jorge, Kanzis y Adán. Íbamos, por supuesto, acompañados de Mario (el Jefe de Tropa) y Chucho (el jefe de Expediciones) con su hijo Beto. Por ahí iba de colado El Topo, el roversaurio favorito del Grupo 2 de Poza Rica y de otros Grupos del Distrito. Era un campamento de adiestramiento para los Guías, pero como sólo éramos tres guías, decidimos llevar a nuestros subguías. El plan fue ir a Tancoco, Veracruz a acampar cerca de las pozas y alejados por completo de la civilización humana. Llegamos a Tancoco tres horas después de que en el retén del aeropuerto de Poza Rica nos hicieran la vida imposible. Bajamos de los coches, tomamos las mochilas y empezamos a caminar. Como a los 500 metros notamos que había actividad... Nuestra sorpresa...