De zanahorias, huevos y café

Para Karlita, con amor...

Era una chica que en una ocasión tuvo un mal día en la escuela... No recuerdo precisamente qué le había pasado, el caso es que llegó alicaída a casa. Su padre, que era cheff, al verla llegar le preguntó qué sucedía. Obviamente ella prorrumpió en quejas e incluso profirió algunos improperios contra las situaciones y personas que la aquejaban. El papá, con mucha calma y comprensión la escuchó hasta que terminó su perorata. Una vez finalizado el rosario de quejas, se levantó y le dijo que lo siguiera a la cocina.

Una vez en la cocina, el papá sacó tres cacerolas, las llenó con agua y las puso al fuego. Después buscó una zanahoria, un huevo y un poco de café de grano; puso la zanahoria en una de las cacerolas cuando el agua comenzó a bullir, y el huevo en la otra. Molió el café y cuando el agua estuvo a punto, lo puso en ella. La chica, extrañada, preguntó a su padre qué pretendía; él, con un ademán, le indicó que esperara y que observara.

Minutos después, sacó la zanahoria y el huevo y los colocó en sendos platos. Coló el café y lo sirvió en una taza y preguntó a la hija:

-¿Qué observas?
-¿Qué observo? Papá, por favor... es tan simple... Una zanahoria, un huevo y una taza de café.
-Observa más detenidamente. Coge un tenedor y aplasta la zanahoria, pela el huevo y prueba el café...

Y así lo hizo. El papá preguntó de nuevo.

-Ahora, ¿qué observas?
-Pues que la zanahoria está blanda, el huevo duro y el café... pues sabe rico... tiene muy buen aroma... No entiendo a qué quieres llegar, papá.
-Muy bien hija... el punto es este: Imagina que el agua caliente es una situación adversa de la vida. Cuando las personas se ven en una situación de estas, reaccionan de distintas maneras; algunos se vuelven blandos, como la zanahoria, y tienen miedo y se vuelven frágiles;otros se vuelven duros y se encierran en su mundo, como pasa con el huevo. Pero hay quienes en lugar de dejarse afectar, logran transformar su entorno aprovechando las oportunidades que trae la vida, a pesar de lo adverso... como el café, que logra dar al agua su sabor, aroma y textura...Así, en lugar de abatirte, modifica tu entorno y saca partido a cada situación de la vida...